Ginseng

El Ginseng es considerado como un curalotodo.

Historia

Hace dos mil años, en el último periodo de la era Ha, en China, ya se descubrían los efectos terapéuticos del Ginseng, cual se utilizaba en veintiuna enfermedades.

Parece ser que las primeras raíces llegaron procedentes de Corea hacia China y ya se le denominaba elixir de la vida.

Estas raíces se plantaron en los bosques de Manchuria y allí encontraron un terreno apropiado para desarrollarse, siendo consumidas preferentemente por la población local.

En 1711, y merced al descubrimiento que de ella hizo un sacerdote francés, la raíz llegó al Canadá y allí se le encontró similitud con otra raíz llamada Panax quinquefolium, pero de la cual no se hacia uso medicinal alguno.

A causa de su consumo masivo la población se la catalogó como droga, hasta que en 1880 pasó a ser considerada una hierba utilizada como aditivo para enriquecer el té.

Así como los médicos orientales consideran a esta raíz como una especie de curalotodo, la medicina occidental la tiene sumida en un desprecio absoluto, al igual que hace con el resto de las plantas utilizadas por la sabiduría popular.

Solamente el auge de la medicina natural y el hecho de que personajes importantes, entre los que no han faltado médicos, la utilizaran como energizante y revitalizador con gran éxito ha sido lo que movió a ciertos investigadores a reconsiderarla.

El resultado de esto es que en la actualidad el ginseng es la planta más consumida en el mundo después de la menta y de ella se extraen sus principios activos para fabricar jabones, cremas de belleza, chicles, bebidas y hasta cócteles exóticos.

El verdadero ginseng

Es tal el éxito de esta raíz que actualmente la mayor parte del ginseng salvaje está acabado y solamente se le puede encontrar en zonas desérticas y de difícil acceso en las montañas de Manchuria, China.

En Corea quedan solamente unas pocas raíces salvajes y las nuevas especies cultivadas parece ser que no tienen el mismo efecto, aunque eso tampoco ha podido ser comprobado.

La buena raíz se vuelve roja al cocerla, mientras que la otra apenas deja el color blanco.

Propiedades

Pertenece a la familia de las araliacede y sus principales componentes son las saponinas, de las cuales se encuentran hasta trece diferentes.

Entre los minerales hallados están el aluminio, el fósforo, el hierro, el calcio, el magnesio, el manganeso, el plomo, el potasio, el solicio y el sodio.

Contiene vitaminas B y B1, así como doce aminoácidos varios azúcares y diversos enzimas, siendo su composición química similar al alcanfor.

Crecimiento

Es una planta que proporciona frutos y diversas semillas, pero de las que solamente se utiliza la raíz, por ser la parte más activa.

Crece en lugares oscuros, sin luz directa que la pueda dañar, y su madurez tarda en completarse casi seis años.

Este crecimiento tan lento hace que el terreno en el cual se implanta se empobrezca grandemente, tardándose casi quince años en su recuperación, y eso partiendo de un terreno muy rico.

Cualquier utilización de fertilizantes químicos la daña y el crecimiento se realiza con mucha más lentitud, lo mismo que ocurre con las plagas o insectos, los cuales la atacan con facilidad, ya que es una planta muy delicada, sin apenas defensas.

Su cultivo debe hacerse manualmente y hay que terapias de cuando en cuando, ya que una luz indirecta fuerte le afecta, lo mismo que los cambios bruscos de temperatura.

Todo este lento y delicado proceso de crecimiento ha hecho que su precio en el mercado sea muy alto y que al mismo tiempo se trate de forzar su masificación.

Esto ha dado lugar a una serie de picarescas, como es el recolectarla antes de que haya madurado o distribuir como ginseng lo que no es tal.

Una variedad rusa conocida como eleuterococo se la denomina cada vez más como ginseng siberiano, lo que da lugar a no pocas confusiones, asunto poco lógico, ya que el eleuterococo tiene suficiente categoría como curativo y no necesita dar lugar a confusiones.

Efectos

En la medicina china se utiliza para enfermedades tan dispares como la impotencia, gastritis, parasitosis, artritis, insomnio, depresiones, pérdida de memoria cansancio, falta de entusiasmo o actividad, así como para combatir las fiebres.

Pero es su efecto para asegurar la longevidad, eterna juventud y combatir la falta de apetito sexual, lo que la han hecho sin lugar a dudas la preferida del público.

Remedios

Idaptogeno

Esto es, aporta al organismo enfermo o sano las sustancias que le son necesarias para soportar las situaciones extremas y le adapta a la nueva situación hostil, sea cual sea su naturaleza.

El organismo así estimulado es capaz de iniciar un maravilloso proceso de autocuración, mucho más racional y seguro que el que pueda proporcionar cualquier fármaco selectivo.

Su capacidad, así mismo, de estimular las defensas disminuidas es algo patente y la capacidad restaurativa que esto proporciona es algo a tener en cuenta, máxime cuando no disponemos de demasiados productos estimulantes de las defensas.

Por citar un ejemplo, hay que mencionar que los astronautas rusos toman ginseng como adaptógeno y para estimular sus defensas ante agresiones nuevas.

Cansancio

Ya sea de origen nervioso, estrés, patológico o puramente fisiológico, como en el caso de los deportistas, lo cierto es que las personas ven aumentadas sus fuerzas y la resistencia a la fatiga es notoria, llegándose a encontrar mejoras en el rendimiento de hasta el 35 por 100.

Los ancianos son las personas que mejor notan estos efectos, seguidos de los deportistas profesionales, los cuales ven aumentados sus rendimientos hasta un 10 por 100.

Intelecto

Sus efectos sobre la esfera cerebral son más espectaculares en ancianos, y los ginsenósidos que contienen y proporcionan una mejora en la irrigación cerebral, lo que se traduce en una mayor memoria y coordinación motriz.

Los estudiantes y cualquier otra persona sometida a un gran esfuerzo mental también notan estos efectos aumentando la capacidad de aprendizaje, retentiva y habilidad para solucionar problemas complejos.

De igual manera, los oligofrénicos, autistas y con cualquier otra deficiencia mental mejoran grandemente con su consumo.

La mejora en la homeostasis, la mejor función endocrina y la potenciación del sistema nervioso autónomo dan como resultado una agudización de las funciones cerebrales.

Diabetes

Es una de las mejores indicaciones, ya que el extracto de ginseng es capaz de anular una hiperglucemia inducida artificialmente, aun cuando la función pancreática este deprimida.

Su efecto sin embargo es muy corto, apenas cuatro horas, y por tanto no se pueden suprimir totalmente los fármacos antidiabéticos,

Actúa sobre el sistema enzimatico de la glicogénesis corporal de una manera distinta a la insulina y al mismo tiempo favorece la formación del glucógeno hepático a través de la glucosa.

Es por este motivo por el cual los niveles de glucosa disminuyen cuando se administra ginseng.

Arteriosclerosis

Su ingestión facilita la combustión y aprovechamiento de las grasas alimentarias e impide que el exceso se deposite en las arterias y los hepatocitos.

Efecto anabolizante

Tomándolo junto a una dosis extra de proteínas aumenta la síntesis y el sistema muscular es capaz de retenerlas durante más tiempo, lo que da lugar a un aumento de la masa muscular en poco tiempo.

Este efecto se logra merced a uno de sus componentes, el prostisol, el cual incrementa la función del enzima        DNA-RNA, el cual es transferido fácilmente al citoplasma.

Anemia

Su ingestión facilita la fijación del hierro a los eritrocitos, lo que mejora espectacularmente los problemas de asimilación del hierro y las anemias por carencias.

Su administración junto al quelato de hierro asegura la curación de una anemia ferropénica en un tiempo 70 por 100 inferior a la terapéutica normal.

Hígado

Tiene un efecto protector de las células hepáticas, tanto si están lesionadas por alcohol, por rayos X o por cualquier otro tóxico.

El ginseng se comporta en estos casos extrayendo los tóxicos acumulados, especialmente los peroxilipidos.

Rejuvenecedor

Sus efectos se basan principalmente en su oposición a que se formen radicales libres, ya que posee un efecto antioxidante.

También actúa sobre las glándulas endocrinas restaurando las dosis de vitamina C en las suprarrenales, estimulando la hipófisis y bloqueando lo excesos de cortisona endógenos.