Perejil

El perejil es algo más que un adorno y condimento alimenticio.

Historia

El perejil es una de las plantas aromáticas más conocidas y sin embargo es de las que menos se aprovechan sus cualidades curativas.

Antiguamente se le consideraba una forma de apio y aunque pertenece a la familia de las umbeliferas, lo cierto es que ni su sabor ni sus propiedades son similares.

De origen tóxico, era utilizada ampliamente por los romanos y los griegos tanto como condimento, como desinfectante para heridas o diurético.

Siembra

Se puede plantar en una simple maceta casera y tendremos así una imprescindible hierba alimentaria y curativa a nuestro alcance.

Se siembra en primavera y florecerá entonces al principio del verano, dando lugar a unos tallos de no menos de veinte centímetros de altura.

Hay que procurar que no le dé el sol de pleno.

Consumo

Añadir esta planta en la mayor cantidad posible a todas las ensaladas.

En los platos cocinados debe echarse al final de la cocción.

La infusión de un puñado de perejil en un litro de agua es una bebida eficaz para combatir el reumatismo.

Propiedades del perejil

Su contenido es rico en pro-vitamina A y sus principios activos son el apiol, ácido palmítico, apigenina, miristicina y aplina.

Las semillas son cantidades importantes de vitamina B1, B2, PP, E, rutina y cantidades importantes de vitamina C.

Así mismo, contiene fósforo, calcio, hierro y azufre.

Esta mezcla le confiere por tanto propiedades como antiescorbutico, antianémico, antioanoréxico, diurético, emenagogo, colagogo y sedante.

Su consumo, pues, es obligado tanto en las comidas como en infusión, pudiéndose comer indistintamente las raíces, las hojas o las semillas.

Beneficios

Diurético

Su acción es muy fuerte y es capaz de lograr lo que otros productos químicos no pueden hacer, con la ventaja de aportar además el resto de sus elementos nutrientes.

Debe ser consumido por tanto por cualquier persona que retenga líquidos, ya sean prostáticos, nefriticos cardiópatas o, simplemente, obesos.

Se prepara una infusión, se la filtra y se bebe cada tres horas.

Cuando exista una retención leve, como es el caso de la celulitis, bastará con tomar una infusión detrás de cada comida.

Retraso de la menstruación

De siempre se ha utilizado con la pretensión de provocar un aborto, tanto ingerido como puesto en el cuello de la matriz, pero los resultados son muy variables en este sentido.

Lo único recomendable es tomarlo cuando exista un retraso en el periodo, ya que su efecto emenagogo es muy potente y, así mismo quita los dolores de las dismenorreas (menstruaciones dolorosas).

Lactancia

Tiene un potente efecto galactófugo, esto es que detiene la producción de leche si se aplica una cataplasma sobre el pecho.

Las mujeres que lactan deben tener la precaución de no condimentar sus alimentos con demasiado perejil, aunque por vía digestiva su acción en ese sentido es muy pequeña.

Dolor de muelas

Es un remedio muy antiguo y consiste en mezclar perejil, aceite y sal e introducirlo en el diente enfermo.

El dolor desaparecerá lentamente, al mismo tiempo que se comienza a curar la posible infección.

Mezclado con clavo o su esencia, aplaca el dolor de muelas más rebeldes.

Conjuntivitis

Se puede aplicar el perejil sin cocer metiéndolo en un trapo y retorciéndolo para extraer su jugo el cual será aplicado directamente en los ojos.

También se puede utilizar la infusión y aplicarla directamente para lavados o como colirio.

Es totalmente inocuo y sus efectos son extraordinarios.

Para los cabellos quebradizos

Macerar en alcohol de 40 un puñado de perejil, junto con otro de ortigas, durante una semana.

Pasado este tiempo, friccionarse una vez por día el cuero cabelludo.

Para el cutis agrietado por el frío o con tendencia a rojeces, se realiza una infusión y se aplica directamente sin secarse.

Hemorragia nasal

Se introduce una torunda de algodón empapada en zumo de perejil en la fosa afectada.

Acidez de estómago

Beber una infusión de semillas al terminar cada comida y sazonar los platos con la hierba fresca.

Hepatopatías

Hervir durante cinco minutos manzanilla y raíces de perejil y tomarlo bien caliente varias veces al día.

También se le puede añadir achicoria y miel en casos más agudos.

Otras enfermedades en las que también puede ser útil el perejil es en abscesos y heridas (en cataplasma), contusiones, hipertensión arterial, parásitos en los genitales (mezclar las semillas con aceite de oliva), meteorismo y flatulencias intestinales, así como en las picaduras de insectos.

Remedios

Sus semillas, que son en este sentido más activas que las hojas y tallos, se toman también en infusión para facilitar la regla.

Los tallos y hojas son antisépticos de la sangre y las vías intestinales y urinarias, estimulantes de los órganos de fibra muscular y urinarias, y de los órganos de fibra muscular lisa (intestinos, vejiga y útero) y beneficiosos para la digestión.

Otra propiedad conocida del perejil es la de agotar la secreción láctea, para lo cual deben cubrirse los senos con cataplasmas de esta planta sujetas con una venda.

Las hojas solas se aplican a modo de apósito antiséptico sobre cualquier llaga o herida.

El jugo fresco es tan útil como el de perifollo para las oftalmias más graves y debe introducirse directamente en el ojo, recién exprimido.

El mismo jugo, en la dosis de una cucharadita y tomado diariamente en ayunas, corrige las blenorragias y todas las infecciones del aparato urinario.

El rabo del perejil se emplea como supositorio para los lactantes estreñidos y las raíces para hacer tisanas diuréticas contra la hidropesía, la ictericia y los cálculos del riñón.