Salsifí y escorzonera
Al salsifí y escorzonera se le reconocen efectos diuréticos.
Cocina
Se consume cocida en ensaladas y guisos.
Crudos, picados y aderezados con aceite de oliva, sal marina y zumo de limón, tanto los salsifís como las escorzoneras resultan deliciosas.
Los brotes tiernos se pueden utilizar como los espárragos.
Propiedades de salsifí y escorzonera
El Salsifí y la escorzonera son unas plantas herbáceas muy nutritivas y constituyen una buena fuente de energía gracias a sus hidratos de carbono.
Pertenecen a la misma familia que la aguaturma, y son ricos en insulina, como ésta, por lo que se recomiendan a los enfermos de diabetes, desnutrición y anemia.
Contienen además nitro que es depurativo de la sangre, sustancia que les confiere propiedades sudoríficas y diuréticas.
Beneficios
Contribuyen a descongestionar los riñones, el hígado y los intestinos.
Remedios
La raíz de escorzonera seca muy picada, y en la cantidad de 30 a 50 g por litro de agua, se hierve durante media hora para obtener una decocción que da buenos resultados en el tratamiento de la gota, el reumatismo y las enfermedades de la piel.
Esta misma aplicada en forma de loción, contribuye a resolver la costra de leche y diversas irritaciones de la piel.