Enfermedades que causan el abuso de grasas
Una obstrucción importante de un canal arterial puede provocar un paro cardíaco.
Enfermedades que causan el abuso de grasas.
Los lípidos no consumidos se van depositando paulatinamente en las paredes inferiores de los vasos sanguíneos y aunque este proceso es muy lento, ya que el organismo trata una y otra vez de darles alguna utilidad, con el paso de los años el depósito graso va aumentando y solidificándose al no tener ya ningún movimiento.
Estos residuos sólidos se denominan placas de ateroma y si la evolución no se detiene se califican, pudiendo llegar a desprenderse y provocar una trombosis o un infarto.
El sucesivo engrosamiento de la pared vascular a causa de los depósitos grasos hace que su luz se estreche y el aporte sanguíneo se reduzca.
Llegado a este punto, el corazón aumenta su presión para asegurar el suministro adecuado de sangre, lo que consigue en parte.
Sin embargo, aunque el sístole pueda restablecer la nutrición adecuada no ocurre así con el diástole, lo cual provoca estancamientos en la circulación de retorno, lo que da lugar a una eliminación defectuosa de los residuos, así como un intercambio entre arterias y venas muy lento.
Una obstrucción importante de un canal arterial puede provocar un paro cardíaco irreversible o no, según se actúe rápidamente para solucionarlo.
La suma de una serie de circunstancias, entre las que están la obesidad, el sedentarismo, el fumar, la diabetes y la herencia, hacen que los problemas derivados por el consumo exagerado de grasas saturadas se agudicen, llegando a un momento en que la situación parece que sea irreversible, por más que las personas intenten cambiar de vida.
Los médicos luchan contra el exceso de colesterol administrando medicamentos de dudosa o nefasta utilidad, como los derivados del clofibrato, y recomendando a sus pacientes que no coman huevos.
Pero no es el colesterol el causante de sus males, sino la combinación entre éste y las grasas saturadas, al que también se une el calcio, no por exceso sino por descalicificación.
La carencia de magnesio y potasio, contribuye a que los ateromas formados no se disuelvan y el círculo mortal se cierra aún más.
Los estudios sobre la prevención curación de las enfermedades producidas por la alimentación grasa han llevado a que se recomiende aumentar la proporción de grasas poliinsaturadas de la dieta, ya que éstas se mezclan con las saturadas, haciendo que circulen fluidas en sangre.
Lo que ocurre es que no solamente con tomar grasas vegetales se soluciona el problema, ya que sin ejercicio adecuado las grasas insaturadas se separan para proporcionar energía, mientras que las saturadas no pueden ser consumidas a causa de poco movimiento que realizamos en nuestra vida cotidiana.
La solución es más sencilla de lo que parece.
- Evitar la ingestión de carne de mamíferos
- Consumir aceites vegetales y frutos secos
- Comer pescado de todo tipo, incluido el azul
- Tomar suplementos de lecitina y vitamina E.
- Realizar ejercicio físico adecuado.