Lácteos

Los productos lácteos son la principal fuente de calcio y una importante fuente de proteínas con un número de calorías mínimo.

La leche descremada y la leche cortada tienen incluso menos calorías por gramo de proteínas utilizables que el yogur.

Sin embargo, el yogur azucarado comercial, anunciado como un buen alimento de régimen, no es una fuente de proteínas baja en calorías.

Sabemos que el queso aporta muchas calorías porque conocemos su alto contenido de grasa, siendo del 26 al 30 por 100, pero los quesos se sitúan cerca del yogur y la leche sin descremar, debido a que su contenido es extraordinariamente alto en proteínas.

El queso tiene del 18 al 26 por 100 de proteínas frente a sólo el 4 por 100 de la leche.

Un trozo de unos 50 gramos de queso nos proporciona casi el 30 por 100 de nuestro consumo diario de proteínas.

El contenido de proteínas relativamente bajo de algunos productos lácteos está compensado por el hecho de que se presentan en formas que normalmente ingerimos en grandes cantidades.

Por ejemplo, dos tazas de leche nos proporcionan más de un tercio de nuestro consumo diario de proteínas.

Comparándolo con otro alimento como los tallarines cuyo contenido de proteínas es tres veces superior al de la leche, para alcanzar las mismas proporciones de nuestro consumo diario de proteínas con tallarines que con dos tazas de leche, tendríamos que tomar cuatro tazas de tallarines hervidos.

La cuestión es que, mientras que se pueden tomar fácilmente dos tazas de leche al día, no es probable que tomemos cuatro tazas de tallarines.

Algunas personas no quieren en aumentar su consumo de productos lácteos debido a su contenido de grasa, pero esto no debería frenarles, porque hay muchas y deliciosas formas de disfrutar productos lácteos bajos en grasa.